Los gatos son unos vomitones. Seguro que alguna vez has tenido que recoger el vómito de tu pequeño amigo felino… pero, ¿qué pasa si los vómitos de tu gato son frecuentes?

Existe la idea generalizada de que es normal que los gatos vomiten a causa de bolas de pelo que se crean en su estómago y que resultan indigeribles para el animal. Esta creencia es más bien equívoca, la realidad es que no debería ser normal que tu gato vomite con frecuencia y, en el caso de que así fuera, el motivo no sería el pelo.

Lo más importante cuando detectes que tu amigo felino no digiere bien su comida es que lo lleves al veterinario. El tipo de vómito es importante para determinar la causa y hacer un diagnóstico, pero en el veterinario también le harán distintas pruebas como un análisis de sangre o una ecografía intestinal para examinar su tripita.

 

Tips para detectar si el pelo es la causa de los vómitos de mi gato

¿Cuándo el gatito vomita expulsa pelo? Esta es una de las primeras preguntas que debes hacerte. Si la respuesta es afirmativa, es probable que el motivo principal sea que el pelo se ha acumulado en su intestino, para ello, puedes darle malta, que es un laxante suave que ayudará a que tu felino se deshaga de la pelusa. No obstante, lo más importante es que lo lleves al veterinario para determinar si bien, el animal ingiere más pelo de lo normal –hay gatos que se acicalan más de lo habitual y se puede deber a: el estrés, el dolor o el picor, también puede ser un síntoma de pulgas o una alergia…– o el felino no elimina el pelo que ingiere –que podría relacionarse con una enfermedad intestinal—.

    ¿Con qué frecuencia vomita mi gato?

    Si el felino vomita semanalmente lo normal es que no tenga nada que ver con la acumulación de pelo en el aparato digestivo. Habría que ver si está relacionado con otros síntomas como la pérdida de peso y de apetito, su estado anímico (apatía), las diarreas o que orine y beba más de lo normal. Uno de los factores a tener en cuenta también es el de la edad, si el animal tiene más de 7 años, los vómitos podrían estar relacionados con una enfermedad más severa.

    ¿Cuáles son las posibles causas de los vómitos?

    Hay multitud de enfermedades que se pueden relacionar con un síntoma como los vómitos crónicos o intermitentes, pero todas se pueden detectar a tiempo con visitas rutinarias al veterinario. Algunas de ellas se corresponden con causas digestivas como, por ejemplo, las infecciones; la hipersensibilidad alimentaria o alergia alimentaria; la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD) o el linfoma intestinal.

    Los vómitos también pueden relacionarse con causas no digestivas y en este caso podría ser una enfermedad renal crónica –frecuente en 1 de cada 3 gatos a partir de los 10 años y de 1 cada 12 a partir de los 15 años—, hipertiroidismo o diabetes. Además, hay algunos felinos que tienen un apetito voraz e ingieren los alimentos muy rápidamente, a causa de ello vomitan el pienso al poco de comer y este no está digerido. Este tipo de sintomatología también es común y puede deberse a varias causas que se relacionan con el comportamiento del felino hacia la comida, así que te recomendamos que también visites al veterinario para buscar una solución a los atracones de tu gatito.

    Como conclusión, es necesario desestimar la idea preconcebida de que los vómitos de gato son “normales” y que siempre están relacionados con las bolas de pelo. Conocer los síntomas es determinante para realizar un diagnóstico precoz a tu amigo felino y terminar con sus vómitos.