Si tienes a un gato como compañero de vida, seguro que no deja de sorprenderte su escrupulosa limpieza y los largos ratos que puede pasar lamiéndose su brillante pelaje. Sin embargo, a pesar de su metódica y concienzuda higiene, es necesario que tú también contribuyas en su aseo. Además, estos cuidados te ayudarán a forjar un vínculo con tu mascota y permitirán que le conozcas de una manera más especial y que te familiarices con su pelaje, piel y otras partes del cuerpo que muestran su estado de salud. 

En este post, te desvelamos algunos consejos para lograr la higiene adecuada de tu gato y que estos cuidados resulten fáciles e incluso divertidos para los dos. 

 

El baño

La expresión “llevarse el gato al agua” ya adelanta la dificultad que puede suponer el baño de un felino, pero no es un imposible. La fobia al agua de los gatos se debe a los orígenes desérticos de su raza, además de su condición prudente y desconfiada. El agua no solo les genera miedo o confusión, sino también curiosidad y sorpresa. Para acostumbrarle, lo mejor es comenzar a familiarizarlos con el baño desde una edad temprana y poner en práctica los siguientes consejos con una actitud tranquila y positiva:

  • Si seguimos tirando de expresiones populares, «vayamos por partes» es la mejor máxima en estos casos. Antes que introducir a tu gato en el agua, mójalo con una esponja o trapo húmedo poco a poco, para evitar que le genere rechazo, y ve aumentando la cantidad de agua a medida que se vaya acostumbrando. 
  • Cuando haya superado este primer contacto y se haya acostumbrado a la sensación de humedad, es buena idea jugar con el gato en un barreño con muy poca agua e intentar que lo disfrute. Las carantoñas y caricias, si no se muestra receptivo, siempre ayudarán a tranquilizarlo. 
  • En este proceso de adaptación, siempre es mejor utilizar agua caliente ya que los gatos prefieren el calor y será más confortable para ellos.
  • Es importante usar un champú para gatos con un pH adecuado para su piel y pelo. No utilices nunca champú humano, ya que puede ser tóxico para ellos.
  • Para secarle, emplea una toalla limpia y calentita y, si es preciso, utiliza un secador de pelo a baja potencia y guardando la distancia. 

El cepillado del pelaje 

Uno de los hábitos más importantes para cuidar la higiene de tu gato es el cepillado diario del pelo o, al menos, semanal. Esto le ayudará a mantener su piel y pelo sanos, evitando los problemas de salud que pueden provocar las bolas de pelo o la dermatitis. Además, ayudará también a mantener tu casa limpia libre de pelusas. 

Aunque parezca una tarea sencilla, hay varios aspectos que se deben tener en cuenta para el cepillado: 

  • Existen diferentes tipos de cepillos para gatos dependiendo de la largura de su pelo, por lo que es imprescindible informarse sobre cuál es el más adecuado.
  • Lo mejor es comenzar muy suavemente, con calma y paciencia para que tu gato pueda acostumbrarse a la sensación que le causa el cepillo.  
  • Si se pasa el cepillo en ambas direcciones, será más fácil eliminar los pelos sueltos y deshacer los nudos que se hayan podido formar. También ayuda utilizar un guante de masaje y luego pasar el cepillo. 
  • El cepillado suele ser placentero para el gatito, pero siempre es bueno terminar con un juego de recompensa para que se quede con una sensación positiva.
  • En temporada de muda de pelaje, que coincide con la primavera y el verano, es necesario un cepillado más regular y cuidadoso. 

El cuidado de las uñas 

El cuidado de las uñas son un punto vital en la higiene de un gato. En primer lugar, es necesario proporcionarle un rascador para que pueda afilarse las uñas él mismo, aunque con una supervisión de que lo hace correctamente y que mantiene las uñas en buen estado. Si no es así, es mejor llevarlo al veterinario para que se las cure o se las corte, aunque si sigues unas pautas puedes hacerlo tú mismo.  

  • Para que se acostumbren (ya que puede angustiarles y muestren resistencia) lo mejor es hacerlo desde una edad temprana.
  • Lo importante es conseguir una postura cómoda entre los dos, puedes sujetar su cuerpo entre los muslos y, si se agita, acaríciales la barriga para que se relaje.
  • En cuanto esté calmado, corta las uñas sin acercarte a la base y hazlo poco a poco en lugar de operar con un único corte. 
  • Cuando cortes las uñas, aprovecha y vigila su estado porque son un buen indicador de la salud de tu mascota. Si están demasiado duras o demasiado blandas son signos de una posible malnutrición o de infección. 

Los dientes 

Cepillar los dientes de un gato puede resultar una tarea imposible, pero es necesario hacerlo de manera puntual. Igualmente, para mantener su limpieza hay que controlar regularmente la aparición de sarro y evitarlo proporcionando a tu mascota alimentos duros que favorezcan la masticación y abundante agua fresca. 

Una buena higiene dental evitará también otras enfermedades, así que es importante poner atención en ella y ofrecerle juguetes especiales para la limpieza de la boca. 

La limpieza del arenero 

Para mantener tu hogar limpio y además cuidar la higiene de tu gato, es necesario que su arenero esté siempre higienizado, evitando que la orina y las heces se acumulen. Para ello, lo mejor es comprar uno de fácil limpieza que permita filtrar la arena y, además, que esta sea aglomerante. Lo más recomendable es revisar y limpiarlo diariamente porque si no lo hacemos, el olor puede hacer que el gato evite hacer allí sus necesidades y decida hacerlo en cualquier otro lugar. 

Cuidado de ojos y orejas 

Los ojos de los gatos son muy delicados, por lo que es mejor pedir siempre consejo al veterinario antes de aplicarle cualquier producto, aunque sea indicado para su higiene. 

En cuanto a las orejas, solo debes limpiarlas si observas que se acumula suciedad. Eso sí, nunca se debe hacer con un bastoncillo de algodón como los que usamos los humanos, sino con un pequeño trozo de algodón o de gasa estéril con suero fisiológico. Esto evitará que se acumule la suciedad y afecciones en el oído como la otitis.

La alimentación, un imprescindible 

Con todos estos tips, no solo ayudarás a tu gato a ser la mascota más pulcra y aseada, sino que podrás controlar su salud de manera periódica y evitar enfermedades. Todo ello se debe completar con un dieta sana y equilibrada que ayude a mantener a tu gato en la mejor condición física, como nuestros piensos Exquisite que cuidan la correcta relación de Ácidos Grasos Omega 3 y Omega 6, esencial para su organismo, disminuyen los efectos de la inflamación tales como la dermatitis y contribuyen a mantener su piel sana y pelo brillante.